jueves, 24 de noviembre de 2016

El futuro de los ingenieros de caminos

Los ingenieros de caminos seguirán sobresaliendo si se sitúan a la vanguardia de las nuevas disciplinas emergentes, para dar respuestas creativas y de calidad a problemas complejos.

La sociedad experimenta en la hora actual profundos cambios, una suerte de destrucción creativa shumpeteriana. Nos enfrentamos a retos de gran magnitud como el crecimiento demográfico, la escasez de recursos, las desigualdades económicas, la transformación del tejido productivo y la creciente automatización de procesos, la demanda de servicios urbanos y de transporte de calidad, el crecimiento del comercio internacional y el aumento de la competitividad a escala global. Una profesión que está llamada a desempeñar un papel de primer orden para aportar soluciones a todos estos desafíos es la de los ingenieros de caminos.


A modo de ejemplo, con respecto al caso de Cataluña, en el futuro cercano tendremos que proponer soluciones para el Corredor Ferroviario del Mediterráneo, el eje viario Tarragona-Andorra, el desdoblamiento de la N-340, garantizar la capacidad de los embalses, anillar el suministro de agua en alta, mejorar las redes de servicios primarios en zonas urbanas, potenciar la generación de energía limpia, completar el desarrollo del saneamiento, mejorar el sistema de gestión de residuos y dotarse de una red logística intermodal de primer nivel para garantizar el transporte de mercancías que dé apoyo al tejido productivo.

Para dar soluciones de calidad a problemas tan complejos, estas transformaciones deberán ser lideradas por profesionales que aglutinen tres cualidades esenciales: la creatividad vehiculada a través del diseño interdisciplinario; el rigor académico y científico, y finalmente la vocación de servicio y la honestidad como motores principales del impulso creativo.



Nuestro reto es el de dar continuidad digna de tal nombre a la herencia que hemos recibido de los compañeros que nos han precedido.

Los avances tecnológicos nos permiten dotarnos de sofisticadas herramientas de diseño y de apoyo a la toma de decisiones para dar forma a las soluciones creadas. En este sentido, cinco son las nuevas disciplinas en las que estamos llamados a sobresalir:

  • Diseño: dirigir problemas complejos empleando el diseño interdisciplinario, integrando armónicamente diferentes talentos.
  • Big Data: el análisis avanzado de datos, así como el diseño de plataformas de business intelligence para la toma de decisiones.
  • La automatización de procesos, la robótica, los modelos de inteligencia artificial y el aprendizaje automático.
  • La aparición de nuevos materiales con altas prestaciones, soluciones específicas para cada proyecto y prototipo.
  • BIM: gestión integral del ciclo de vida de los activos que integran toda infraestructura. Los ingenieros de caminos, por nuestra formación y tradición heredada, disponemos de una oportunidad extraordinaria de sacar partido de las nuevas herramientas y metodologías para dar un nuevo impulso a la profesión y aportar respuestas que sorprendan por su calidad y originalidad. En toda herencia es especialmente relevante el papel activo del accipiens.


Nuestro reto es el de dar continuidad digna de tal nombre a la herencia que hemos recibido de los compañeros que nos han precedido, y que han configurado el carisma de una profesión de vanguardia caracterizada por el prestigio, la excelencia y la voluntad de servicio.